Nunca se ha llegado a un acuerdo respecto a cuántos días a la semana es necesario lavarse el pelo para lucir un cabello espléndido y es que, precisamente, no hay una respuesta única e irrefutable, todo depende de las características de tu cabello y de tu forma de vida.

¿Cuántas veces hay que lavarse el pelo según el tipo de cabello?

Por lo general, recomendamos que los cabellos grasos se laven 3 o 4 días a la semana y los secos con algo menos de frecuencia, 2 o 3 días semanalmente. Los pelos finos deben lavarse más regularmente que los gruesos, alrededor de 3 veces por semana, pues normalmente se engrasan más rápidamente. Por otra parte, el pelo rizado suele necesitar menos lavados semanales que el liso, al igual que los cabellos teñidos respecto a los que no han sido tintados. En definitiva, los cabellos secos, gruesos, teñidos y/o rizados pueden lavarse menos a menudo, siendo 2 o 3 veces por semana suficientes. Eso sí, sobre todo, debes conocer tu cabello y adaptarte a sus necesidades.

Consecuencias de lavarse el pelo más o menos frecuentemente

¿Es malo lavarse el pelo a diario?

Lavarse el pelo diariamente tiene una visible consecuencia: las glándulas sebáceas, que nos avisan de que hay que lavar el cabello tras generar grasa, producirán aún más aceite capilar. Esto se debe a que muchos champús quitan demasiado aceite, lo que hace que las glándulas sebáceas tengan que compensarlo. Además, se secará en exceso el cuero cabelludo. De esta forma, se acabará entrando en un círculo vicioso: cuánto más te limpias el pelo, más se te ensucia.

Sin embargo, debemos evitar también el otro extremo, que también es contraproducente. A pesar de que el mito popular dice que el pelo se acostumbra y se termina disminuyendo la grasa capilar si no nos lavamos el pelo con mucha regularidad, mantener el cabello graso y sucio producirá encrespamiento, eliminará la luminosidad, debilitará las raíces e incluso provocará la caída del cabello y podrá causar problemas dermatológicos.

¿Cómo saber cuántas veces hay que lavarse el pelo?

Adapta tu rutina capilar en función del tipo de cabello

Como cada persona tiene unas glándulas sebáceas diferentes, hay que conocer el funcionamiento del cabello de cada uno para poder determinar correctamente cuántas veces a la semana debes lavártelo. Igualmente, hay que tener en cuenta otras características sobre el tipo de cabello como si es liso o rizado o cuál es su textura. Por último, no hay que olvidar el trato que da cada uno a su cabello y otros factores relacionados con el estilo de vida: el tipo de champú y acondicionador, el uso de tintes, secador y plancha, el deporte y el clima y la contaminación del lugar en el que vives pueden afectar a la frecuencia necesaria con la que lavarse el cabello.

Si te has quedado con alguna duda, puedes entrar en contacto con los profesionales de Rueber Vital. ¡Estamos deseando ayudarte!