Lavado de cabello rizado
Antes de la ducha
Intenta desenredar tu cabello aún seco, ayudándote con un poco de aceite o acondicionador y tus dedos o un peine de púas anchas. Así evitarás que tu pelo se enrede más en la ducha. Sobre pelo mojado, es más fácil que se produzcan roturas por un proceso mecánico como puede ser en desenredado. Además, aportas hidratación extra a tu pelo.
Durante la ducha
Para sacar la máxima forma de tus rizos, debes lavar tu pelo con un champú libre de sulfatos. Sin embargo, es importante que tu cuero cabelludo este limpio para facilitar el volumen y formación de rizos desde la raíz. Por ello, una vez a la semana o cada diez días se recomienda un lavado en profundidad en la zona del cuero cabelludo.
Cuando apliques el champú, deberás incidir en la raíz. Con tus dedos puedes ayudar a pasarlo un poco hacia las puntas, sin frotar para evitar que se enrede.
Nutrición y acondicionador
Antes de aplicar más productos…
Antes de aplicar cualquier mascarilla o acondicionador, es necesario que seques el exceso de humedad de tu cabello. De esta forma evitarás que el producto resbale en tu pelo sin ser absorbido. Para ello, utiliza una toalla y con pequeños toques seca tu melena. ¡No retuerzas el pelo pues podría provocar miniroturas!
Revisa su composición
No utilices productos con…
- siliconas ya que añaden peso a tus rizos y los apelmazan
- sulfatos o alcoholes no grasos, puesto que resecan tus rizos.
Hidrata en profundidad
Una vez a la semana, aplica una mascarilla hidratante y déjala actuar durante varias horas para aportar más brillo e hidratación a tus rizos. Puedes elaborar la mascarilla tú misma utilizando aceites como el argán o productos hidratantes como el aloe vera natural.
Después del aclarado, te recomendamos aclarar tu cabello con agua fría para cerrar la cutícula, mantener la hidratación y conseguir mucho brillo.
Secar y estilizar el cabello rizado
Después de lavar el cabello, retira el exceso de humedad con una toalla de microfibra o una camiseta de algodón. De esta forma favorecerás que el pelo forme sus rizos naturales. Para evitar el temido frizz, seca con pequeños golpes, apretando en lugar de frotar.
Lo ideal es dejar secar tu pelo al aire para evitar el encrespamiento y proteger tu cabello del calor, ya que los rizos son por lo general mucho más secos que el pelo liso. Si vas a utilizar secador, utiliza siempre un difusor. No coloques el secador desde abajo, pues puede llegar a deshacer el rizo y provocar frizz.
Para evitar el encrespamiento, te recomendamos que utilices una crema antifrizz o aceite ligero antes de cualquier producto de peinado. Después, podrás utilizar un gel o crema fijadora especialmente diseñada para tus rizos. Recuerda que no debes aplicar estos productos con el pelo empapado, pero tampoco semiseco. El cabello debe estar húmedo, aunque sin chorrear agua. Especialmente si estás recuperando tus rizos o aún no cuentas con la definición suficiente, puedes ayudarte con los dedos para dar forma a tus rizos uno a uno.
¿Lista para deslumbrar con tus rizos? Si tienes dudas, consulta a nuestros expertos capilares.
